Hughes & Kettner ha presentado la última entrega de su gama de amplificadores de pedal: el StompMan, que toma el célebre formato AmpMan de la compañía y lo reinventa como una unidad de estilo stompbox.

A pesar de su tamaño, el StompMan parece ser una bestia poderosa y cuenta con la tecnología patentada Spirit Tone Generator de Hughes & Kettner, el mismo circuito que se encuentra en la línea Spirit AmpMan, mucho más grande.

Cuenta con un circuito completamente analógico que promete un tono auténtico y una sensación dinámica ultradirecta similar a los amplificadores de válvulas convencionales más grandes, y se dice que es un centro de nivel profesional que saca lo mejor de los preciados pedales de efectos.

Otra hazaña impresionante son los 50 vatios de potencia que ofrece, dependiendo de la impedancia del altavoz conectado, que funciona junto con el control Sagging, una excelente adición que tiene como objetivo colorear aún más su tono controlando la saturación del amplificador de potencia.

En cuanto a los controles, al parámetro Sagging se le suman los potesnciómetros de Tono, Ganancia, Master, Presencia y Resonancia. Mientras Master establece el nivel de salida general, Tone y Gain trabajan juntos para marcar la respuesta del amplificador.

Los controles de Presencia y Resonancia son capaces de acceder a un barrido completo de limpios y sonidos clásicos y, cuando se combinan con los accesorios apropiados de preamplificador y pedal, una gran cantidad de tonos pesados ​​​​modernos.

También hay dos interruptores de pie: el interruptor Bypass/FX Loop, que elimina el preamplificador integrado de la cadena de señal, y Solo, que funciona con un potenciómetro de volumen secundario adjunto en la parte trasera para acceder a hasta seis dB de impulso.

Otras especificaciones incluyen el FX Loop ajustable, que le permite incorporar pedales de reverb y retardo, y un potenciómetro Trim que lo ayuda a encontrar ese «punto dulce sónico» (199€).